| Dejando la huella de algunos primeros pasos

Conecté una memoria flash en mi vieja y lenta computadora, salió la imagen de un jóven, con nada de especial, excepto su valentía de cuestionar las limitaciones que debemos sufrir los cubanos. Lo admito, tuve que contener una exclamación… hasta ese momento, no pensaba que alguien fuera capaz de sacar los problemas de una forma tan atrevida, directa y honesta. En la siguiente mañana, la gente lo comentaba en las escuelas, en las esquinas y hasta en mi centro laboral, a modo de susurros. Luego sobrevino el silencio y todo pareció volver a la normalidad, no por ser normal, sino por ser la misma, esa que lleva desesperanzas, negación y tristeza.

Muchos años después de conectar aquella memoria flash, un chico que apenas conocía me preguntó: ¿Te acuerdas de Eliecer Ávila, el muchacho de la UCI? Tiene una propuesta que deberías leer – Yo pensé que lo habían desaparecido y admito que me alegré muchísimo de saber que estaba activo, pues se trataba de una esperanza de cambios para mi país – Ha fundado un Movimiento que se llama Somos+, pero ya sabes… sin internet es casi imposible saber mucho de ellos; tengo entendido que una muchacha en España ayuda, intentaré comunicarme…- Mientras tanto, un grupo de amigos nos uníamos a dialogar con el fin de ayudar a Cuba en lo que fuera posible y, de repente, me dice aquel chico que ya me era conocido – Tenemos el contacto de los que apoyan al Movimiento en el exterior!- Yo supe en ese instante que debíamos ser parte de nuestra historia y que era la oportunidad perfecta para involucrarnos.

Hoy somos realmente más, y se unen tantos, que cuando trato de recordar aquellos primeros días cuando no éramos ni diez en el exilio, es casi imposible no compartir la emoción. Recuerdo un comentario sobre que debíamos llamarnos Somos-, en su momento me dolió, ahora me río porque el tiempo pone todo en su lugar. Hay que estar dentro para saber lo delicioso que es compartir con más cubanos llenos de energía, habilidades, propuestas, curiosidad, deseos de hacer. Hoy solo puedo sentir orgullo de lo que se logra cuando tan solo el individuo lo quiere, todo lo que se consigue, cuando se pone amor y dedicación en algo.