(Para los Wscorpios)
Por: Pedro Acosta
Días atrás escribí un reportaje: “Peligro”. Se refería a las serias dificultades que presentan los hospitales, principalmente por carencia de recursos y la presión con la que trabaja el personal de la salud. Problemática a la que tampoco le es ajena la negligencia y la desidia. Provocadas, mayormente, por esas privaciones y acrecentadas por los trances que agobian la vida del cubano.
Plasmo aquí algunas ideas que pudieran contribuir a solucionar ese real peligro que existe en nuestros hospitales aunque a todos nos duela y algunos traten de desconocerlo. El pueblo no debe acudir a los centros de salud con temor no a la cura, sino a lo que allí pueda pasarle.
Médicos, enfermeras y técnicos no pueden llegar a los hospitales luego de batallar con el transporte, pensando qué dará de comer a los suyos. Y que su hijo está disgustado porque no tiene casi ropa que ponerse. Tener en consulta una larga fila de pacientes. Estar ahogándose de calor. Que desea y necesita unas vacaciones pues el estrés lo mata. No tiene tiempo para almorzar. Pensar que recetar, pues la medicina idónea no está disponible y el análisis no aparece o está mal hecho. Que el área de curaciones tiene muy malas condiciones y le faltan suministros de todo tipo para poder hacer la cura debidamente. Y luego, corriendo, partir a realizar una operación de urgencia.
A los médicos se les debe abonar un salario que les permita dedicarse por entero y sin preocupaciones a tan noble labor. Retribución que debe garantizar la solución de sus problemas materiales y el pleno disfrute de su tiempo de ocio y vacaciones. Enfermeras y técnicos también deben recibir un estipendio decoroso para que puedan desempeñar su tan imprescindible labor.
Salario que evite que ellos vean en las colaboraciones un medio para paliar sus irresolutos problemas económicos y esta no debe hacerse en detrimento de la calidad en la atención médica a los nuestro. Deben cobrar el salario íntegro que se paga por su trabajo en el exterior y abonar al estado el impuesto que corresponda.
Eliminar los miles de consultorios del médico de la familia y buscar una forma de atención que no necesite de tantos. Ahorrando así recursos que pueden ser dedicados a otras cuestiones relativas a la salud.
Estudiar la real necesidad de personal administrativo en este sector.
Desarrollar una poderosa industria de producción de medicamentos que ampare los logros científicos alcanzados en la elaboración de fármacos y en especial los de última generación.
Cuánto beneficiaria y ahorraría a la salud pública la existencia de consultas, clínicas y hospitales particulares. Y aquel que cuente con los recursos y así lo desee se atienda en ellas. Sector privado que además contribuiría a potenciar el desarrollo de la medicina en el país.
Lo que se recaude por el cobro de impuestos a estos particulares, el dinero que ingrese al estado por el tributo de los trabajadores de la salud que laboren en el exterior, las ganancias que genere esa industria de medicamentos y el presupuesto estatal que se designe al giro deben contribuir al pago que merecen sus especialistas y que los hospitales del estado cuenten con recursos y estén en las condiciones idóneas.
Han prejuiciado al cubano con la propiedad privada, pero más debería alarmar, porque establece privilegios, que con el dinero del pueblo existan centros como el CIMECQ, Cira García, clínicas del Minint y el pequeño Centro Hospitalario que tiene el Comité Central. Todos a disposición de determinados dirigentes y oficiales del país.
¡Ahora saltarán los Wscorpio!
Claro que para llegar a lograr esto se requieren cambios, en especial en la manera de pensar y de enfrentar las cosas. Hay que despojarse de dogmas, de fórmulas fracasadas. Dejar de hablar de: “evitar la acumulación de riquezas”. Algo que por demás nadie se ha atrevido a enmarcar y a definir.
En el colmo de la torpeza prefieren, gobierno y seguidores, que la riqueza escape al extranjero y no que quede aquí en poder de un compatriota.
Requerimiento imprescindible para esa salud pública que soñamos es que el país se desarrolle tecnológicamente y que todos los sectores crezcan a un alto ritmo y eso significa entre otras cosas: fuerte inyección de capital extranjero y un sector privado que tribute debidamente al estado.
A estos criterios responderán los “comunistas” con retóricas sobre el fin de la independencia y de la patria como si en el mundo y en Cuba solo fueran ellos quienes la desean y luchan por ellas. Estos razonamientos a unos parecerán de izquierda, a otros de derecha. Realmente no los he clasificado.
Las soluciones que presenta el régimen a través de sus lineamientos no son nada nuevas.
La salud publica en el país, al dejar de “mamar” de la teta Soviética, está en constante deterioro y es imprescindible ponerle coto a tal situación.
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Pedro Acosta

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Aunque no niego esta posibilidad,no la creo prudente,ya que si un grupo llega al poder por esta via,de que no sera capas despues para mantenerlo,y podria llegar a ser hasta peor que los actuales tiranos.A estos que se las dan de todo poderosos hoy,y que el triunfalismo los mata,yo los catalogo de ratas inmundas,y estas si ven caer a alguna de ellas,salen como rebaño despavorido,a lo mejor con algunos ejemplos se cree dentro de ellos el temor,o mejor dicho se incremente el temor, ya que todo esto que hacen es buena muestra del miedo que los invade.
Y lo mas importante es el despues,ya que hay que institucionalizar el pais de tal forma que la democracia sea fuerte,y que tenga los mecanismos de auto inmunidad, que impidan caer el errores,los que podrian ser muy grandes, dado que encontrarian un pais en ruinas,en lo material espiritual,moral, y de todo tipo.
La pesadilla.
Mientras la oposición duerme, los Castros y su camarilla del nuevo hombre comunista goza de la vida loca, y el exilio, derrama lágrimas negras. Cuando despierten habrán pasado otros cincuenta y ocho años, para la recuperación hay que aplicarle la eutanasia política a todos los sapratrás del régimen las cabezas de régimen comunista, que no son muchos y los demás son garrapatas de la dictadura, como dice el refrán muerto el perro se acabó la rabia, como usted cree que se liberó Cuba del yugo español? Tirándoles flores?. No! fue a sangre y fuego, gracias la intervención de Teodoro Roosevelt y sus rough riders acompañados por las fuerzas mambises, que para su entendimiento, se componían del 80% negros esclavos, 10% mulatos y un 10% de blancos descendiente de Españoles, el resto eran leales a la madre patria, si los opositores de aquella época, hubieran actuado de la misma manera que hoy están actuando la oposición, hoy todavía seriamos súbditos de España, y estaríamos mucho mejor.
Yo considero que con un grupo de no más 50 expertos tiradores bien calificados sincronizados por toda Cuba en un día fijado y a una hora fijada, se puede lograr lo que hasta ahora no se ha podido lograr en cincuenta y ocho años, de pañitos tibios. Otra solución es, la exterminacion fisica de los sicarios. Para triunfar tenemos que ser radicales, gústele a quien le guste, y pésele a quien le pese.
Pero por favor, no vivamos mas de sueños, si queremos ser libre hay que pelear a mi manera, eutanasia política es el mejor y eficaz remedio mas efectivo sistema para terminar con la pesadilla de 58 años.